Ptoo, Ptoos o Ptous (en griego, Πτῶος), en la mitología griega, fue el epónimo del monte Ptoo en Beocia en donde se encontraba la ciudad de Acrefias. Se cree que era hijo de Atamante y Temisto[1][2][3]​ o de Acrefeo y Euxipe.[4][5]​ Otras referencias lo hacen hijo de Apolo y Zeuxipe, una hija de Atamante.[6]

Epíteto de Apolo

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Ptoo era también un epíteto de Apolo, bajo el que el dios fue honrado en un santuario cerca de Acrefias, no lejos de Tebas. Pero también el epíteto puede estar vinculado al nombre del Ptoo anterior.[2][7]

Sus fiestas, las Ptoia, sufrieron una interrupción a principios de la época del Imperio romano pero unos años más tarde, en época de Calígula, un ciudadano de Acrefnio llamado Epaminondas fue su agonoteta y las recuperó con más magnificencia que antes. Perduraron al menos hasta el siglo III.[8][9]

Referencias

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  1. Pseudo-Apolodoro, Biblioteca mitológica, 1. 9. 2.
  2. a b Pausanias, Descripción de Grecia, 9. 23. 6, citando a Asio.
  3. Escolio de Apolonio de Rodas, Argonáuticas, 2. 1144.
  4. Herodiano 1. 112 & 337.
  5. Esteban de Bizancio s. v. Ἀκραιφία.
  6. Así, escolios de Pausanias 9. 23. 6, con referencia a Píndaro. El pasaje de Esteban de Bizancio, de hecho, dice lo siguiente: «Acrefia... fue fundada ya sea por Atamante o por Acrefeo, hijo de Apolo. La montaña lleva este nombre por Ptoo, hijo del personaje antes mencionado (τοῦ αὐτοῦ) y Euxipe». La versión dada en escolios por Pausanias ha llevado a varios estudiosos a cambiar «Euxipe» por «Zeuxipe», y asumir que «τοῦ αὐτοῦ» se refiere a Apolo en lugar de Acrefeo. Esta interpretación, sin embargo, ha sido contestada por el hecho de que Esteban debe haber seguido a Herodiano, donde los nombres de los padres son inequívocamente, Acrefeo y Euxipe, y que el pasaje de escolios de Pausanias permite, de manera alternativa, que no necesariamente Apolo y Zeuxipe sean los padres de Ptoo. Ver Realencyclopädie der Classischen Altertumswissenschaft, Vol XXIII, 46, Psámate-Pyramiden (1959), p. 1890.
  7. Solé, Gerardo; Bachs, Elisenda; Castelreanas, A. (1988). Los grandes descubrimientos de la arqueología 4. Barcelona: Planeta-De Agostini. p. 206. ISBN 84-395-0687-2. 
  8. Gascó, Fernando (1996). El paganismo durante el Alto Imperio. Madrid: Akal. p. 30. 
  9. Charles Victor Daremberg; Edmond Saglio. «Ptoia». Dictionnaire des Antiquités grecques et romaines. p. 751.